Desde un punto de vista digamos “técnico”, la religión es perjudicial si está al servicio de un poder que desea un pueblo dócil que no le dé quebraderos de cabeza. En este caso, se convierte en un arma extremadamente peligrosa, y una potente herramienta de manipulación (no me hagáis dar ejemplos ahora; podemos descubrirlos claramente en la actualidad –guerras santas, y todos esos rollos-; si ahora empiezo a enumerarlos, se me olvidará todo lo que quiero escribir, tan endeble es mi memoria).
Pero… ¿y si vemos a la religión desde el punto de vista emocional? ¡Ostras, pero si es un bálsamo para nuestras angustias existenciales básicas!
Siempre y cuando, la fe esté presente, claro. Condición sine qua non.
A ver, ¿quién no se ha preguntado alguna vez de dónde venimos y adónde vamos? ¡Pues todo el mundo! (si os fijáis, suele pasar cuando nos enfrentamos al pago de una hipoteca). La religión no da la respuesta de lo de la hipoteca, pero sí una solución transitoria a la pregunta trascendental: en casi todas las culturas (y he puesto “casi” para curarme en salud, dada mi vasta ignorancia), siempre hay un ser superior, creador del mundo mundial y alrededores.
Alguien estuvo aquí antes que nosotros para dejarlo todo arreglado y darnos una sorpresa. Fantástico.
Bien, ya tenemos resuelto el “de dónde venimos”. Qué alivio. Ahora nos queda el “adónde vamos”, que no es moco de pavo.
Pues también tenemos solución emocional aunque, en este caso, es más variada, según la religión: por ejemplo, podemos aferrarnos a la vida eterna, que no estaría nada mal si conociéramos las condiciones; o tenemos la opción de la reencarnación, un chollo, porque nos permite vivir varias vidas, como hacen los actores. Sólo le encuentro un fallo, y es un fallo gordo: que no recordemos nuestras anteriores existencias. Es que así no nos sirve de nada, y corremos el riesgo de convertirnos en el protagonista de “Atrapado en el tiempo”, y tropezar siempre con la misma piedra. Por los siglos de los siglos.
Aunque como salida emocional, ya nos vale. A ver quién es el listo que encuentra una respuesta mejor al “adónde vamos”.
Nos queda sin embargo una pequeña gran duda:
El sentido de la vida.
Sí, otra de esas preguntas incómodas:
Aunque como salida emocional, ya nos vale. A ver quién es el listo que encuentra una respuesta mejor al “adónde vamos”.
Nos queda sin embargo una pequeña gran duda:
El sentido de la vida.
Sí, otra de esas preguntas incómodas:
“¿Qué demonios hacemos aquí?”
En este caso, me temo que una respuesta más pragmática se hace necesaria:
Hemos venido a este mundo… a pagar la hipoteca.
En este caso, me temo que una respuesta más pragmática se hace necesaria:
Hemos venido a este mundo… a pagar la hipoteca.
16 comentarios:
Ayyyy...qué razón tienessss
no creo que hayamos venido a nada especial ( alguno quizá sí, pero no es mi caso ) , dudo que vengamos de algún sitio maravilloso, prefiero ni pensar en a dónde vamos, ni sé si algún día acabaré de pagar la dichosa hipoteca, ... pero creo que a nadie le ofenderá si el tiempo que estamos aquí lo intentamos pasar un poco bien, verdad??, pos vamos a disfrutar de esos momentos-regalo, de la naturaleza,de la sonrisa del otro...
(bueno, y ahora a ver si soy capaz de poner bien el alias, que no hay manera...)
Yo soy de la misma filosofía que machulá, no me preocupa adonde voy porque no creo que vaya a ninguna parte, y prefiero darle sentido a mi existencia de manera positiva.
Por cierto, que yo no tengo hipoteca, pero espero tenerla algún día...
Ya ves tú qué inspiración me viene a mí en plena naturaleza, en lugar de escribir bonitos poemas de flores y puestas de sol...
Eso, eso, Machulá, CARPE DIEM, qué narices!!!!!
...Que mi suegra dice que hemos venido a sufrir, ya ves... Y yo le digo que yo he venido a disfrutar, a aguantar las cacas que te tira de vez en cuando la vida, y luego... a seguir disfrutando.
Lidia, siento decirte que, si no tienes hipoteca, tu vida carece de sentido (jua, jua, jua,jua!!!)
Ahora en serio, me gusta eso que has dicho de darle sentido a tu existencia de manera positiva. Mi objetivo es encontrar la paz (por dentro y por fuera... aunque más por dentro... por fuera la cosa está más difícil)
ayyyyyyy
Mercedes, uno puede saber donde está y estar perdido,
un puede saber y tener un mapa de como llegar y estar perdido...
creo que lo importante es saber COMO SE QUIERE IR Y HACIA DONDE
1BESO
la iglesia no resuelve esas preguntas, jejejejeje, a mi no por lo menos, hablo de la institución creada por el hombre
Sí, n-a-s-a, es lo más importante... y lo más difícil!
Bueno, yo no hablo de la iglesia, sino de la religión, que no es lo mismo; en cualquier caso, cada uno elige el camino que cree más adecuado para encontrar respuesta a esas preguntas...Y aun así, no creo que nadie haya dado con la clave...Y ahora que lo pienso, casi mejor así, ja , ja!
Un beso!
Cuanta razón tienes Mercedes !!!!.
Mi Dios en estos momentos se llama Lotería. Y no es un ser. Seria mas bien un estado de ánimo en el que se me aclararían todas las dudas sobre si podré finalmente acabar de pagar algún día mi eterna hipoteca, y a la que no le preguntaria de donde vengo porque no me importa lo más mínimo. Lo importante seria que yo misma ya sabria adónde voy !!!!
Besos
P.D. si este Dios se aparece y me aclara todas mis dudas, estais todos invitados a diez rondas !!!
No creo que tengamso que pagar hipotecas, ni salir de la fe; en todo caso el credo, es el jeugo q nos hace humanos.
Perdona por no0 haber psado antes.
Saludos.
Veo Yolanda que piensas un poco como n-a-s-a, que lo importante es saber hacia dónde quieres ir, y cómo...
Sin duda, la lotería pone el camino mucho más llano para ir adonde sea!!!
Hecho! Cuando te toque (porque te va a tocar!), nos apuntamos encantados a las diez rondas!!!
Mua, mua!!
Peyote, sabes que siempre serás bienvenido! (con o sin hipotecas, con o sin fe)
Me alegro de volver a verte por aquí!
(si ya sospechaba yo que eras una roja, una ácrata y una atea!)
(y seguro que también eres francmasona!)
¡... Y encima, me gustan los bomberos!
¿Qué haremos conmigo???
la religión al servicio del hombre que quiere dominar y manipular no me gusta...
no creo en las instituciones de los hombres. Creo que nuestro Dios está en nosotros.
La fé debe estar presente dentro de uno no por tener o no tener un Dios.
La religión creo que la lleva uno dentro si es eso estoy de acuerdo. la opcion de la reencarnacion mola.
creo que se puede recordar las anteriores existencias
jajajaj me gustó lo de atrapado en el tiempo
A DONDE VAMOS???
mejor donde queremos ir y como vamos a ir no???
1beso guapa esta es mi respuesta, estamos para pagar la hipoteca y que mas?
Estoy de acuerdo contigo en todo!!
Yo creo en la reencarnación y, aunque tengo muy mala memoria, "sé" que tengo escondido por dentro de mi cabezota algún recuerdo, algún indicio, algo...
... Y aquí estamos para pagar la hipoteca... y todo lo que nos echen encima!
Mua mua!!
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