Se acerca a la recepción del hotel con aires de suficiencia. Detrás, su sumisa esposa y dos arrepentidas parejas de amigos. Gira la cabeza, mira con desdén al séquito irrisorio, y suspira. Qué se le va a hacer: más vale mal acompañado que solo, que si no, se aburre.Un día después, descontento e insatisfecho de todo y de todos, aprovecha la cena para llevar a cabo su pequeña venganza personal: devolver la botella de vino que él mismo acaba de pedir, y reclamar otra en su lugar. Que la que le han servido no le gusta. Que le traigan de nuevo la carta. A ver si aprenden estos palurdos del hotel.
Levanta la cabeza con orgullo y satisfacción. En cambio, su sumisa esposa la baja con vergüenza y fastidio. Se toca nerviosamente el dedo anular; la alianza le aprieta cada vez más. El silencioso cortejo jura no volver a pasar las vacaciones con él. Su sumisa esposa les adivina el pensamiento, y les lanza una mirada envidiosa.
9 comentarios:
Oye, últimamente te veo muy negativa en tus relatos. Te voy a tener que pedir otro cuento de fresas, a ver si cambias el tono, jajajaja.
P.D O mejor simplemente me espero a que hayas acabado tu novela y entonces ya estarás más positiva?? ;-)
creo que si yo hubiese sido el amigo, ya no habría llegado a la cena...
¡Esta novela me está consumiendoooo!!!!
A ver si la semana que viene hablo de fresas, melocotones o albaricoques, pero de algo un poquito más positivo! :-D
...Lo que no acabo de explicarme, es cómo este ser tiene amigos que no son como él... Aunque a veces pasa con algunas personas ingenuas, que caen en las garras de ciertos desaprensivos...
como decíamos hace unos días, chère Merce, lo bueno de tener cierta edad es que ya te permites decir lo que piensas, hacer lo que crees conveniente o (desa)juntarte de quien deseas, sin mayores remordimientos de conciencia.
Estas parejas deben de ser relativamente jóvenes o quizás no son realmente amigos, sino sólo conocidos o compromisos...
JE SUIS TOUT À FAIT D'ACCORD!!!
Y sí, tienes razón, los protas del relato tienen edad de participar en "Gran Hermano" (bueno, quizás un poco más mayores, pero que no han llegado a los 30 -edad física-)
no sé... no sé... (llego tarde y discrepando...ejem)... lo de "más vale mal acompañado que solo" no me parece únicamente propio de gente joven... y por supuesto, claro que no son amigos, en el sentido verdadero de la palabra ;)
No, hija, no, por desgracia, lo de más vale mal acompañado que solo lo practica mucha gente, sin distinción de edad!
Sí, si la gent s'estimés una mica més a si mateixa, la felicitat no els seria tan utòpica...com a mínim, lluitarien per aconseguir-la!!!
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