-Antes había más…Eran grandes y silenciosas…
-¿Que había más qué, Marcela?
-Casas abandonadas… Abandonar algo, a alguien. “Sí, ha dejado a su marido por otro”, “¿No sabes? Abandonó a su mujer por una veinteañera…”. Con una casa pasa lo mismo: uno se va con otra más joven, y allí queda, decadente, olvidada, triste, cerrada, sola. ¿No produce una sensación extraña?
-Tiene razón, Marcela. Bueno, ¿qué le parece si nos vamos a dormir?
-…El rasgo más característico es el cristal roto; siempre acaban con un cristal roto, lo cual significa que no sólo no se preocupan por ella, sino que a lo mejor alguien ha intentado entrar; también puede tratarse de una criatura que, jugando con una pelota, haya chutado, y… Pero siempre he preferido pensar que alguien había sentido la misma llamada que siento yo cuando paso por delante de una casa abandonada, esa necesidad de entrar, de pasear por las habitaciones vacías, calladas, llenas de huellas de una anterior vida…Ambiente mudo, olor frío, suelo polvoriento, telarañas colgantes, cristales sucios, hierros oxidados… Y no es que imagine que de un momento a otro van a aparecer fantasmas o que va a pasar algo sobrenatural, no es eso. Es el hecho de saber que allí ha vivido gente y que ya no está, ¿comprende, joven?
-Claro, Marcela, perfectamente…Venga, vámonos a la cama…
-¿Pero cómo puede ser tan descarado? ¡Hacerme estas proposiciones, a mi edad!
-Marcela, no se me vaya por las ramas, que cada noche me monta el mismo espectáculo con tal de no irse a dormir…
-Ya sabe que nunca tengo sueño y que, en cuanto cierro los ojos, sólo veo casas vacías…y veo también mi casa abandonada… ¿Sabe? Únicamente las piedras ofrecen seguridad y demuestran su oposición al paso del tiempo. Su dureza fomenta esa testarudez a no dejarse vencer por los años, y ayuda también a la moral de una casa, que aguanta orgullosa aunque se encuentre sola y deshabitada… Pero si un día recibe un golpe en el cristal de una ventana, si un día alguien profana la tapia o la verja de entrada, ese día su ánimo se hundirá, para dar paso a una depresión de la que no podrá recuperarse. Y entonces las sólidas paredes se vendrán abajo poco a poco, el techo se desmoronará, y la lluvia y el sol se ocuparán de acelerar este lento suicidio. Y con la gente… con la gente pasa igual…
-…Y dicho esto, Marcela, ahora sí, es hora de dormir.
-Yo misma soy una casa abandonada… Me siento sola y vacía…
-Venga, Marcela, no diga esas cosas, que aquí la queremos mucho. Hale, la acompaño a su habitación.
-¿…Sabía que es usted un pesado?
-Lo mismo me repite mi mujer a todas horas.
33 comentarios:
Primeeen!!! Merceditas, no cejaré en el empeño de conquistarte hasta que, en vez de ''me va, me va'' digas ''me pone, me pone''... será un gran paso, juas, juas, juas... besos de aniquilador amoroso!!
...Y con el ansia de desvirgar la entrada, ni he comentado la exquisitez...
Por partes...
(se oyen toses)
Merche, a esta Marcela yo le diría dos cosas (como dicen los chulos de Madrid): que las piedras tienen también fecha de caducidad pues para empezar no son sino los escombros de un Big Bang de hace millones de años. Que si, que sí, que con millones de años da tiempo a ser testigo de muchas cosas, pero ¿para qué? ¿Para contar muertes? ¿Para hacer una estadística secular de las distintas formas que hay para morir?
También las casas de piedra se derrumban... besitos litográficos
P.D: La única piedra eterna es la lápida :(
Qué capacidad para la creatividad... Las casas viejas siempre mantienen ese halo de nostalgia que se impregna en el alma, lo digo por experiencia puesto que he vivido en dieciseis diferentes... Besos y mordiscos
Hermoso cuento, amiga!
Besos!
Todo tiene un ciclo,los tiempos lo marcan y la verdad siempre va montada sobre el.Comienza la semana y hay que ponerle toda la energia,que puedo decir de tu sitio que no te he dicho ya,sábes que me encanta pasar de visita por aqui,vengo siempre porque me reconforta.Hoy llego desde Cuentos y Orquideas y tengo un nuevo cuento a ver si gusta,hecha esta la invitacion entonces,te mando un fuerte abrazo.Mucha luz y hasta pronto...
Hay casas que no mueren nunca porque se impregnaron de vivencias de verdad. En cambio hay otras, que simplemente fueron eso, casas, no hogares. Éstas sí mueren porque la piedra también se marchita.
Besósculos de buenas noches con deditos que apuntan hacia allí o aquí, yo qué sé. Que a mí no me puedes señalar con el dedo, sino decirme a la derecha, a la izquierda, al fondo... lugares de una habitación recién descubierta.
Cuídate y siempre gracias.
No le tengas en cuenta a la pobre Marcela su desconocimiento del Big Bang, ella tan metida únicamente en "Big Brother". Para Marcela, las piedras son sólo eso, piedras, y da gracias que no se ha puesto a explicar las que tiene en el riñón y en la vesícula...
Y mira, ya puestos, ni las lápidas duran eternamente, sólo en plan metafórico...
Un beso pétreo!
Ahora no sólo envidio tu gran arte, sino también tu experiencia de haber vivido en varias casas viejas... :-)
Un beso!!
Siempre contenta de verte por aquí y de leer tus comentarios!
Un beso!
...Cómo rechazar una siempre grata invitación a leerte...! Sin duda, encontraré el momento de disfrutar de tus bellas historias...
Un abrazo!
Querido Albertito, eso es, hay casas, y hay hogares. Y dentro de los hogares, hay lugares especiales que quedan tatuados por esas vivencias de verdad que tan bien dices. Y también hay dedos torpes que se caen en un tiramisù, dedos desorientados que acaban vaya usted a saber dónde, y dueñas tontas de dedos, que guían fatal con un "aquí está esto, y allí tienes lo otro".
Besósculos de cuenta atrás positiva! Mua muamuamua!!!!
Ayyyy... pobre Marcelita, que se siente sola, triste y abandonada! :-(
P.D Lo tuyo con las casa abandonadas es pura obsesión, eh? para tu cumple te regalo una ;-)
¿Cómo se atreve usted a exhibir estas joyas sin cobrar entrada? Permítame ponerme de pie y dejar de tipear para poder apluadir a mano llena por la lucidez, la fluidez y la profundidad de este gran cuento.
Muchas gracias,
D.
esos sintomas de la vejez que hacen que uno se sienta cada vez más solo... aunque yo a mis veinte años a veces tambien pienso que estoy muy solo y abandonado cuando alguien que antes llamaba, ya no lo hace...
igual... me gustan las casas viejas y quiero comprarme una!!:P
un abrazo mercé!!
Mercedes,disfrutarías estos días conmigo! Tengo entre manos el proyecto de poner "guapas" dos casonas viejas...Son como 2 señoras, aguantan el tipo con elegancia y tienen todavía un porte "majestuoso" (sobre todo la modernista...¡no te puede imaginar la emoción que he tenido al encontrar los planos originales) la otra, recia, de montaña, sencilla, noble y preciosa también!
...Pues nada me gustaría más!! :-)
Sí, sí, lo reconozco, siempre he estado obsedée con el tema...
Amigo Daniel, no se engañe usted, que lo que por aquí brilla sólo es bisutería barata!
Aun así, acepto su comentario con júbilo y le doy las gracias eternamente.
PD.-¿Cree que tengo alguna probabilidad, por mínima que sea, de convertirme en segunda de A.Q?
Siempre hay un momento en la vida, sin importar la edad y por los motivos que sean, en que nos sentimos como una casa abandonada...
Un abrazo sin soledad!
PD.- Yo también quiero comprar una casa vieja! :-)
Chus, que me has puesto los dientes larguísimos!!!!!! ¿Y las tienes que poner guapas sólo por fuera, o también por dentro? ¿La casa modernista está en Barcelona?
Oh, tienes mucha suerte...
VAYA CON EL CRISTALITO,EL REYNO NO COME CARNE.....LA CASA ME GUSTA MUCHO.....FOTO TUYA,PUES MUY BONITA.......ABRAZOS......
Pobre Marcelita! tan casasola,en el caserón del geriátrico! O sería un manicomio?
mil besos*
¿A que es chula la casa de la foto? No me fijé si tenía algún cristal roto...pero vamos, el tejadito estaba que daba asco, eso sí quedó claro!
Un abrazo!
Esta es una pregunta que sólo puede responder..........LILIANA!
Lilianita, ven y dinos si conoces a Marcela!!!!
Besos grandes como un caserón!
Mercedes,tengo un libro de J.R.i B. que quizás te pueda documentar,aparte podrás encontrar algo en el COAc,Aunque la publicación que tengo (la 1º edición data de 1975) la estaban descatalogando...cuando la adquirí.Está editada por el COACB (cuando aún formaban un único colegio de arquitectos Cataluña y Baleares)y el autor es Ignasi de Solà-Morales...sI TE INTERESA, QUEDAMOS!
¡PERO QUÉ ME DICES!!!???????? Es uno de los poquísimos libros que hay sobre esta hombre, ¿verdad? Oh, Chus, me harías la señora más feliz del mundo si le pudiera echar un vistazo (fotocopiarlo no, claro, que está prohibido ;-)
Si no fuera mucha molestia para ti, estaría encantada de quedar! ¿Quieres que te dé mi email?
¡vale!¿cómo lo hacemos?
tardeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee pero llegué.....es que Marcela nos ha desvelado, no pudo dormir en toda la noche......resulta que vino Ralph y Judecito juntos, parece que alguien les mandó llamar, quién sería? y no contenta con eso, que llega el policíaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, pues con eso tuvimos pa´no dormir, nada, cero, zero, ni una pestañeada.....uf! el caso es que tarde pero llegué.....cuál era la pregunta?
ZZZZZZZZZZZzzzzzzzzzzzzzzzzz
jijijiji buenísimo MerC!!!!!
besitos......y todavía no saben lo del delincuente!
=))))
...Te he dejado otro comentario en tu blog (jo, parecemos espías, jajaja)
¡Estaba segura de que conocías a Marcela!
La pregunta la había hecho Rayuela pero... ya has respondido!
Dale muchos recuerdos de mi parte, y también a Ralph y a Judecito!!!! Y para ti, un beso!!!
Las casas como las personas también tienen alma darling. Algo que sabe muy bien la buena de Marcela.
Oiga joven, está vd. de una prolífica calidad literaria que le envidio sanamente.
Besos.
...No sé si agradecer más tus alabanzas a mis letras o el haberte dirigido a mí como "joven"... Voy a consultarlo con la almohada...
Besos con mucha alma casera!
LO EXTRAORDINARIO YA LO HAS ESCRITO TÚ Y ME HA GUSTADO ACOMPAÑAR A MARCELA A LA CAMA
GRACIAS BESOSABARAZAOS
...Y yo te agradezco que lo hayas hecho! A veces se pone un poco pesada con el rollo de las casas abandonadas...
Un abrazo!
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